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Muy particular éste programa de televisión en donde hay un jurado de, por lo menos dudosa reputación, que cuando alguien no baila bien, lo juzgan y le dan bajos puntajes, pero si ese personaje da rating, la producción entonces, utiliza el voto del público para salvarlo, que obviamente es otro negocio dentro de un gran negocio, en donde el conflicto, la pelea, las discusiones son la base de éste programa de televisión.

Vivimos en un sistema perverso que genera necesidades al público, necesidades que realmente no existen y una parte de la sociedad no toma consciencia que le están generando esa necesidad.

Tomando este programa de televisión como ejemplo, podemos ver que quienes lo producen, quienes lo ven, no les interesa para nada el baile en sí, y por supuesto mucho menos los sueños que, se supone, tratan de alcanzar quienes bailan a lo largo del certamen.

Lo triste es que este programa genera otros programas que ocupan la pantalla durante todo el día, hablando de lo que pasó en el programa.

Somos una sociedad pensante que debemos analizar lo que nos quieren “vender” y no tragarnos cualquier “sapo”.

Nosotros como consumidores tenemos el poder del control remoto, y podemos y debemos elegir. Si queremos elegir este tipo de programa, que sea nuestra elección y no una imposición.

Otra cosa interesante para preguntarnos, ¿quién dice que el rating que nos proponen es real? Habría que averiguar de quienes son esas empresas y que intereses persiguen.

Busquemos programas de televisión, que tengan estos tips:

  • Nos enseñen
  • Que podamos aprender y aprehender.
  • Que nos sumen conocimiento.
  • Que nos ayuden al crecimiento personal.

Seguramente ese tipo de programas no tendrán rating, pero son programas sanos con contenido que se puede debatir en familia. De eso se deberían tratar los programas de televisión, que sean generadores de búsqueda de aprendizajes para usar nuestro cerebro, nuestra alma y nuestro saber entender, para crecer como personas, como sociedad.

Que así sea.

Fundación Alas de Águila
Por una Juventud con Valores